Guarda y custodia en Tenerife, qué es y cuánto cuesta
Hoy en Abogados Tenerife les explicamos en qué consiste y cuanto cuesta el procedimiento de guarda y custodia de los hijos en parejas de hecho o no casadas
Si tuviéramos que hacer una definición rápida diríamos que la guarda y custodia es como el divorcio, pero para las parejas con hijos que no están casadas. Pero como todas las definiciones rápidas, ésta no es del todo exacta, así que lo mejor será que veamos con un ejemplo en qué consiste este procedimiento.
Supongamos que tengo una relación con alguien, sin estar casados, fruto de la cual nace un hijo. La relación sentimental se acaba, pero es necesario regular los derechos y obligaciones de cada padre respecto al niño que ha nacido. Como no hay un matrimonio que disolver, no puedo acudir a un procedimiento de divorcio, así que lo que debo iniciar es un proceso de guarda y custodia judicial.
Y decíamos antes que la guarda y custodia no es exactamente un divorcio, dado que éste -además de regular todas las cuestiones inherentes a los hijos- además disuelve judicialmente el matrimonio e incluso puede pronunciarse sobre los bienes y deudas adquiridos por la pareja mientras estaban casados. Estas dos cuestiones no las trata la guarda y custodia, por lo que podríamos mejorar la definición inicial y decir que el procedimiento de guarda y custodia es similar a la parte del divorcio que versa sobre los hijos comunes.
Al igual que el divorcio, la guarda y custodia puede tramitarse amistosamente o de forma contenciosa, en función de si ambos progenitores se ponen de acuerdo sobre las cuestiones básicas que hacen mención a sus hijos comunes. En el primer caso el procedimiento es simple, rápido y barato: meramente se ha de redactar un convenio regulador, adjuntarlo a una demanda conjunta en el juzgado de familia y una vez ratificados en los acuerdos en el juzgado se dicta sentencia homologando dicho convenio. En caso de recurrir a la vía contenciosa, cada parte deberá contratar un abogado y un procurador y se celebrará el oportuno juicio.
La sentencia de guarda y custodia, como decimos, trata exclusivamente sobre todo lo que afecte a los menores dada la situación de separación de sus padres, y en concreto:
- Bajo qué custodia quedarán los niños: puede ser monoparental o custodia compartida.
- Cómo quedará el calendario de estancia de los menores con sus padres: con independencia del tipo de custodia, es preciso fijar con precisión y claridad qué días pasarán los niños con cada progenitor, quién los recogerá y dónde se producirán las entregas, tanto durante las semanas laborables como durante los periodos de vacaciones de verano, navidad, semana santa y carnavales.
- Procedencia o no de pensión alimenticia: si la custodia es compartida, normalmente no se aplica una pensión de alimentos, salvo respecto de aquellos gastos extraordinarios que por su naturaleza son imprevisibles. En la custodia monoparental la sentencia de guarda y custodia sí fina una pensión alimenticia a pagar por el progenitor no custodio como contribución a los gastos del otro padre.
- Incidentalmente, la sentencia puede establecer quién de los dos progenitores puede hacer uso del domicilio conyugal. Eso sí, sin entrar a valorar cuestiones como quién debe hacerse cargo de la hipoteca.