Apelación en divorcio

Apelación en divorcio, ¿merece la pena?

Si no está conforme con la sentencia, puede optar por interponer un recurso de apelación en divorcio: ¿cuánto cuesta y qué tiempo adicional implica?

apelación en divorcio

La sentencia de divorcio permite que frente a la misma se interponga un recurso, y no son pocos los clientes que nos suelen preguntar a los abogados de familia si una determinada apelación en divorcio daría buenos resultados o no. Por eso vamos a dedicar este artículo a explicar los pros y contras de un recurso de estas características, así como el precio que tiene y los plazos que suele consumir. Vaya por adelantado que habría que analizar el caso concreto antes de poder dar una opinión más en profundidad, pero confiamos en que por lo menos les queden algunos conceptos claros.

¿Qué tiempo tengo para presentar un recurso de apelación en divorcio?

Desde el momento en que el juzgado notifica la sentencia de primera instancia a su procurador dispone usted de un plazo de veinte días hábiles. Normalmente el procurador recibe la notificación de la sentencia por la mañana y esa misma tarde se la remite por mail o fax a su abogado, pero es posible que éste no contacte con usted hasta el día siguiente o el otro, por lo que en los casos en que se esté planteando si interponer una apelación en divorcio pregunte a su letrado cuál es la fecha de notificación.

El plazo empezará a contar a partir del día siguiente al de dicha notificación, y sólo se contabilizarán los días hábiles a efectos civiles. Esto es, no se contarán sábados, domingos, festivos (incluidos los que afecten al municipio donde se halle el juzgado) ni el mes de agosto, que es también inhábil. Por lo tanto, en la práctica los veinte días se acaban convirtiendo en más de un mes (y de dos, si nos topamos en nuestras cuentas con el mes de agosto)

Además, la legislación permite lo que se denomina día de gracia. Esto es, que incluso podemos presentar nuestra apelación en divorcio el día siguiente a aquel en que finaliza el plazo.

¿Cómo funciona la apelación en divorcio? ¿se celebra un nuevo juicio?

En principio la apelación en divorcio se inicia con un escrito interpuesto por la parte que quiere recurrir. En dicho escrito se plasman las razones por las que se entiende que el juez se ha equivocado en sus conclusiones o en la apreciación de las pruebas presentadas, y se indica qué parte de la resolución judicial se debería modificar y en qué terminos. No se admiten pruebas nuevas, salvo las que no se admitieron injustamente en primera instancia, o que éstas sean posteriores a la fecha de juicio o no se hubiera podido disponer de las mismas antes de esa fecha. De este recurso se da traslado al otro abogado, a fin de que se oponga al mismo (interesando que la sentencia no sea modificada) o proceda a su vez a apelar (si es que tampoco está de acuerdo con la sentencia). Ambos escritos son remitido a un órgano judicial superior (la Audiencia Provincial) a fin de que un grupo de magistrados determinen si confirman la sentencia de divorcio o la modifican.

En principio no se celebra nuevo juicio, salvo que las partes lo pidan o haya de realizarse alguna prueba que requiera de la celebración de vista.

El plazo oscila mucho entre juzgados, pero oscila entre los dos y los cinco meses. La nueva sentencia ya no sería recurrible, salvo en casos muy excepcionales.

¿Cuánto cuesta la apelación en divorcio?

La mayoría de libros de honorarios que rigen para cada colegio profesional de abogados suelen fijar como precio para la apelación en divorcio la mitad de los honorarios reclamados en primera instancia, por lo que si pagó 1000 euros por su divorcio contencioso, calcule que le puedan pedir unos 500, más unos 100 euros que viene cobrando el procurador.

En otros despachos, como FM Abogados Tenerife, tenemos un precio fijo de 300 euros para los procedimientos de segunda instancia, tanto si somos apelantes como apelados.

¿Suelen prosperar los recursos de apelación?

La verdad es que no demasiado. Los jueces en segunda instancia respaldan las sentencias dictadas por sus compañeros en un promedio superior al ochenta por ciento. Piénsese que como los jueces de la audiencia no estuvieron presentes el día del juicio de divorcio, se fían de las impresiones que se llevaron sus homólogos, y ante la duda fallan de conformidad con lo ya dictado.

Por lo tanto, es muy importante que antes de decidir interponer un recurso de apelación en divorcio le pida su opinión sincera a su abogado. Sin duda él sabrá si tiene usted más de un treinta por ciento de posibilidades de que se acabe modificando la sentencia a su favor o si meramente va usted a perder tiempo y dinero.